ELRIC DE MELNIBONÉ

ELRIC DE MELNIBONÉ

Michael Moorcock

La demostración de que se puede escribir una gran novela de fantasía en poco más de ciento setenta páginas y que cuente con todos los elementos necesarios de una fantasía de muchos kilates.

Cuando me tengo que enfrentar a un tocho de cuatrocientas o seiscientas páginas, algo muy habitual en este género, siempre siento añoranza de obras como esta.

Un mundo perfilado con múltiples matices subyugantes. Una sociedad decadente, de la que su príncipe heredero y protagonista del libro es, en sí mismo, un paradigma de ese pueblo que gobierna; Una persona débil necesitada de drogas, taciturno, depresivo...En fin, unas cualidades que lo alejan del estereotipo de héroe de fantasía y lo convierten en uno de los mejores personajes del género.

Algunos han comparado a Elric con una estrella del rock, y desde luego ahí están las drogas, el malditismo, las actitudes auto destructivas. No en vano el autor tiene una dilatada carrera musical con el grupo Hawkwind.

Para mí, en realidad Elric es un villano, es el monstruo, el "Drácula" temido y odiado por los humanos. Lo que ocurre es que se nos narran sus acciones desde su punto de vista

He conocido a muchas personas que no sienten ningún entusiasmo por las novelas del príncipe albino. A mí, en cambio, consiguen trasladarme a un mundo de fantasía en el que todo lo mundano desaparece, elevando la imaginación y dejando un regusto de pura evasión.

Ojo, no todas las novelas tienen el mismo ritmo, a veces el bueno de Moorcock se pone de lo más lisérgico y....Bueno, ya hablaré de ellas más adelante.

En cuanto a las ediciones, adoro la de Martínez Roca. Por tamaño, papel (ese toque pulpejo), ilustraciones de portada. Durante años fue la única en España. (desconozco en Iberoamérica) y se hizo inencontrable. Luego vinieron otras de Edhasa, tanto en formato grande como en bolsillo. No tengo nada en contra de estas, pero siento debilidad por Martínez Roca.